26 enero 2009

Se va Alcalde por diputación.


Buenos días pueblo soberano de Manuel Doblado, hoy amanecimos con nuevo presidente, usted leyó bien no le de golpes al monitor, la encargada del ciber donde se encuentra le puede llamar la atención, pero efectivamente los dobladences tenemos nuevo alcalde, se trata de C. Manuel Pedroza, debido a que Leopoldo Villanueva Chávez, pidio ayer licencia por tiempo indefinido para buscar la diputación federal del PRI por el distrito 11 con cabecera en el municipio de Pénjamo, y que abarca también a los municipios de Ciudad Manuel Doblado, Cuerámaro, Abasolo y Huanímaro. Les aseguro pueblo soberano que éste no es el único moviemiento que tendremos en la administración falta la licencia del tesorero y la licenica del secretario del H Ayuntamiento que buscan la presidencia el 5 de julio 2009... y ahora... quién podrá defendernos??
fuente: periodico AM

16 enero 2009

En Relación a la Crisis

En relación a la crisis , esto me recordo a Gabriel García Márquez, aqui lo describo.

Por Gabriel García MárquezImagínese usted un pueblo muy pequeño donde hay
una señora vieja que tiene dos hijos, uno de 19 y una hija de 14. Está sirviéndoles el desayuno y tiene una expresión de preocupación. Los hijos le preguntan qué le pasa y ella les responde: ‘No sé, pero he amanecido con el presentimiento de que algo muy grave va a sucederle a este pueblo’. El hijo se va a jugar al billar, y en el momento en que va a tirar una carambola sencillísima, el otro jugador le dice: ‘Te apuesto un peso a que no la haces’. Todos se ríen. El se ríe. Tira la carambola y no la hace. Paga su peso y todos le preguntan qué pasó, si era una carambola sencilla, Y él contesta: ‘Es cierto, pero me he quedado preocupado de una cosa que me dijo mi madre esta mañana sobre algo grave que va a suceder a este pueblo’. Todos se ríen de él, y el que se ha ganado su peso regresa a su casa, donde está con su mama, feliz con su peso y le dice : Le gané este peso a Dámaso en la forma más sencilla porque es un tonto. ¿Y por qué es un tonto?, Porque no pudo hacer una carambola sencillísima según el reocupado con la idea de que su mamá amaneció hoy con la idea de que algo muy grave va a suceder en este pueblo. Y su madre le dice: No te burles de los presentimientos de los viejos porque a veces salen. Una pariente que estaba oyendo esto y va a comprar carne. Ella le dice al carnicero: ‘Déme un kilo de carne’, y en el momento que la está cortando, le dice: Mejor córteme dos, porque andan diciendo que algo grave va a pasar y lo mejor es estar preparado’. El carnicero despacha su carne y cuando llega otra señora a comprar un kilo de carne, le dice: ‘mejor lleve dos porque hasta aquí llega la gente diciendo que algo muy grave va a pasar, y se están preparando y comprando cosas’. Entonces la vieja responde: ‘Tengo varios hijos, mejor déme cuatro kilos…’ Se lleva los cuatro kilos, y para no hacer largo el cuento, diré que el carnicero en media hora agota la carne, mata a otra vaca, se vende toda y se va esparciendo el rumor. Llega el momento en que todo el mundo en el pueblo, está esperando que pase algo. Se paralizan las actividades y de pronto a las dos de la tarde. Alguien dice: ¿Se ha dado cuenta del calor que está haciendo? Pero si en este
pueblo siempre ha hecho calor! Sin embargo -dice uno-, a esta hora nunca ha hecho tanto calor. Pero a las dos de la tarde es cuando hace más calor. Sí, pero no tanto calor como hoy. Al pueblo todos alerta, y a la plaza desierta, baja de pronto un pajarito y se corre la voz: ‘Hay un pajarito en la plaza’. Y viene todo el mundo espantado a ver el pajarito. Pero señores, dice uno siempre ha habido pajaritos que bajan aquí. Sí, pero nunca a esta hora. Llega un momento de tal tensión para los habitantes del pueblo, que todos están desesperados por irse y no tienen el valor de hacerlo. Yo sí soy muy macho -grita uno-. Yo me voy. Agarra sus muebles, sus hijos, sus animales, los mete en una carreta y atraviesa la calle central donde todo el pueblo lo ve. Hasta que todos dicen: ‘Si este se atreve, pues nosotros también nos vamos’. Y empiezan a desmantelar literalmente el pueblo. Se llevan las cosas, los animales, todo. Y uno de los últimos que abandona el pueblo, dice: Que no venga la desgracia a caer sobre lo
que queda de nuestra casa’, y entonces la incendia y otros incendian también sus casas. Huyen en un tremendo y verdadero pánico, como en un éxodo de guerra, y en
medio de ellos va la señora que tuvo el presagio, le dice a su hijo que está a su lado: ¿Vistes m’hijo, que algo muy grave iba a suceder en este pueblo?

El Beso Prohibido



Leyendo las noticias me fui a encontrar que la ciudad de Guanajuato Capital, en donde su servidor como muchos otros más estudia y vive ahí por las mismas razones, me encuentro con una reverenda jalada de que el alcalde panista Eduardo Romero Hicks (quien obtuvo la alcaldia de la capital que siempre fue priísta debido a una resaca o efecto domino del papel desempeñado por su hermano Juan Carlos como Gobernador del Estado en el sexenio pasado del PAN) se le ocurrió multar con $1,560 e incluso arrestar a los que se besan apasionadamente en la vía pública y gritan güey “con el objetivo de preservar el espacio público como un lugar de convivencia y civismo” así como también a las personas que sin permiso realicen manifestaciones públicas, hazme el Chingado Favor, ahora resulta que debemos pedir permiso para expresarnos además de ser censurados por las autoridades, ¿no será que es la forma que piensan enfrentar la “crisis” con esas multas?

El ayuntamiento de Guanajuato aprobó un reglamento que castiga con árcel o multa a las personas que se besen, pidan limosna o usen palabras altisonantes en la vía pública, señaló el alcalde panista Eduardo Romero Hicks. No se puede permitir que las parejas se den unos “agarrones de
olimpiada” en la vía pública y que sigan usando la palabra güey, señaló el
edil. Para Romero Hicks, la norma no es exagerada y no se hará una
persecución de los ciudadanos. El reglamento sanciona hasta con 36 horas
de cárcel o multas de hasta mil 500 pesos a las personas que, en la vía
pública, pidan limosna, se besen, vendan mercancía informalmente, usen
palabras altisonantes, escupan o no utilicen los puentes peatonales, entre
otros.Via: jornada.unam.mx